domingo, 29 de septiembre de 2013

El encanto de la vida simple.


Cualquier día de la semana, 7 de la mañana, hombre de entre cuarenta y cincuenta años que medio dormido está miccionando, orinando o simplemente meando.
 
Se siente satisfecho él, con su esquijama, calcetines y zapatillas de invierno, con los pelos (si los hubiera) alborotados, quizás balanceando suavemente el cuerpo adelante y atrás, quizás en un alarde de sensualidad rascándose el trasero…

Pero….¡fijate!, perdida entre las legañas se ve una mirada de orgullo, de orgullo de joven macho. ¡Fíjate!, tras esa casi imperceptible mueca chulesca se adivina una sonrisa…

“Lo he vuelto a conseguir, y esta semana ya van dos veces…toda la noche del tirón sin levantarme a mear ni una sola vez...¡si es que estoy hecho un chaval!...jeje".

jueves, 26 de septiembre de 2013

Patio de v-encinas


Encina 1: “Fíjate, se la veía extraña, pero quien iba a decir que acabaría así”

Encina 2: “Pues yo lo dije muchas veces”

Encina 1: “¡Ya salto la lista!, que a toro pasado…

Encina 3: “¿Qué decís que le ha pasado a un toro?, que desde aquí no veo.

Encina 1: “Que no, que al toro nada, que lo que pasa es que hay una muerta”

Encina policía: “¡Circulen, circulen!

Encina 1: “Decididamente esta tía es gilipollas…circulen dice…a unas encinas”

miércoles, 25 de septiembre de 2013

De compartir, de quitar, de creer que nuestra sensibilidad es la universal y si, también de vacas.


Y siempre me resultó muy gráfico y muy revelador el chiste aquel del comunista que en las asambleas cada vez que se proponía expropiar algo para la comunidad gritaba enfervorizado ¡¡si, expropiemos!!. Y se expropiaron fincas, y se expropiaron tractores, y coches y casas y… y cuando se propuso en la misma asamblea lo de expropiar las vacas saltó diciendo  “¡¡ahh no!!, ¡¡que vacas tengo!!.

 
¿Y si todos los españoles nos hiciéramos catalanes y una vez fuéramos todos catalanes nos hiciéramos todos gibraltareños y una vez todos gibraltareños organizáramos un referéndum para ver si nos volvemos a llamar españoles?

¿Y si pa rizar el rizo les proponemos a esos otros vecinos que -simplemente con su estar- impiden que Badajoz tenga playa, que se unan también a Gibraltar y en el referéndum en vez de preguntar si nos llamarnos españoles proponemos llamarnos Íberos pa evitar susceptibilidades?

domingo, 22 de septiembre de 2013

Sucesos

Suceso 2

Hora: 4 de la mañana

Acción: “Papi hay un mosquito que no me deja dormir”

Reacción: Papi se levanta, busca el matabichos, busca al mosquito, no lo ve, se frota los ojos, los entorna, se acostumbra a la luz…¡allí está!, mata al mosquito “ya puedes dormirte tranquila que ese no te molesta mas”

Resultado: mosquito muerto, papi pensando “ya verás como ahora no me duermo”, papi dando vueltas en la cama, papi acordándose de todos los problemas que tiene que solucionar al día siguiente, papi acordándose de la madre del mosquito…

viernes, 20 de septiembre de 2013

De saberes y pareceres.

Y es que seguramente ella se había propuesto reflexionar todos los días sobre algo, unos días sobre una frase atribuida a algún genio, otros sobre alguna noticia de prensa… ahora llevaba unos días con poesía, hoy tenía ante si a Luis Cernuda:

 “Si no te conozco, no he vivido; si muero sin conocerte, no muero, porque no he vivido”.

 Y hoy la reflexión era profunda y estaba muy concentrada: “Claro, tiene razón el amigo Luis, que si no conozco a alguien es como si ese alguien no hubiera vivido, y si no ha vivido y tampoco muere está claro que no puede haber existido, amos que alguien que no conozco es nadie, ósea que un anónimo es…”

 Y justo en ese instante sonó el teléfono:

viernes, 13 de septiembre de 2013

Una tarde de Julio, bajo una encina, en una dehesa.


- “Uff ¿queda mucho?”
- “No, que va, según nos han dicho debe andar cerca, detrás de aquel cerro”.

Y si, allí estaba el susodicho, un pastor de los de antes, bajo una encina, apoyado en su tronco y comiendo un cacho pan sacado del zurrón y perfecta y pausadamente cortado a navaja. Yo creo que nos vio mucho antes que nosotros a él, que cuando le miré él ya nos miraba, y lo hacía como con desgana, sin expresar, y volvió la vista al pan, y otro tajo sin prisa, y otro introducir en su boca como a cámara lenta, imposible adivinar que pensaba aquel hombre aunque la impresión es que nos iba a costar muuuuucho trabajo sacarle alguna palabra.